Albores del nuevo siglo

A medida que se aproximaba el siglo XXI, Rotary se abocó a trabajar para atender a las necesidades de la cambiante sociedad, ampliando sus actividades de servicio para abordar problemas acuciantes como el deterioro de los ecosistemas, el analfabetismo, el hambre en el mundo y los niños en riesgo.

En 1989, la organización aprobó la admisión de mujeres en los clubes del mundo entero y ahora cuenta con más de 145.000 socias en sus filas.

Tras el colapso del Muro de Berlín y la disolución de la Unión Soviética, se formaron o reestablecieron clubes rotarios en Europa Central y Oriental. El primer club ruso se constituyó en 1990, y la entidad experimentó un crecimiento acelerado en los años posteriores a tal evento.

Transcurrido más de un siglo desde que Paul Harris y sus compañeros fundaron el club que dio origen a Rotary International, los rotarios siguen enorgulleciéndose de su historia. Como homenaje al primer club, los rotarios han preservado el lugar original de las reuniones, la Sala 711 del Edificio Unity, de Chicago, restaurándolo y manteniéndolo como en 1905. Durante varios años, el Club Paul Harris 711 se encargó de conservar dicho recinto para que lo visitaran los rotarios. En 1989, después de que se anunciara la demolición del edificio, los socios del club desmantelaron cuidadosamente la oficina y rescataron los elementos del interior, incluidas las puertas y radiadores. En 1993, la Directiva de RI estableció un local permanente para la Sala 711, en el piso 16 de la Sede Mundial de RI, en la vecina localidad de Evanston, Illinois, EE.UU.

En la actualidad, la organización cuenta con más de un millón doscientos mil rotarios, afiliados a más de 32.000 clubes en aproximadamente 200 países y regiones del mundo.